Otra triste historia Como tantas que he escuchado De un amor imposible De un romance mal logrado. Dicen que allá era otro día más En la playa de ipanema Se encontraba un doctor de puesto superior Con su hija lorena. Sentada en un bar esperando al papá Lorena escuchaba un piano El pianista sonrió y lorena cayó Por aquel trigueñisimo bahiano. Poeta soñador, sin rumbo, sin cruzados Pero ella no se iría de su lado. Aquel bahiano de tierra y sol Le enseño lo que es el amor Aquel bahiano fue más que el cielo, Fue más que un dios. La fuerza que los apoderó fue la que luego los traicionó Ahí todavía se oye en el aire A la lorena llorar de amor Por aquel bahiano. Por supuesto el padre puso el grito en el cielo Hija que dirán tu madre y los demás Ese miserable, no es de tu categoría Y no pega en nuestra rica sociedad. Olvídate del bahiano que yo jamás lo permitiré Y voy a llevarte lejos para que no lo vuelvas a ver. Con su alma en pena Y sin consuelo estaba lorena Cuando a la cima del corcovado fue que llegó No puedo vivir sin el amor de mi bahiano Y así mismo abrió sus alas y voló. Aquel bahiano de tierra y sol Le enseñó lo que es el amor Aquel bahiano fue más que el cielo, Fue más que un dios La fuerza que los apoderó fue la que luego los traicionó Ahí todavía se oye en el aire A la lorena llorar de amor Por aquel bahiano. Oooooooooo... Na na na na.... Ooooooeoooo... Aquel bahiano de tierra y sol Le enseñó lo que es el amor Aquel bahiano fue más que el cielo, Fue más que un dios